El cariotipo de fragilidad cromosómica es una técnica de laboratorio que se utiliza para detectar la presencia de una fragilidad en ciertos cromosomas.
Esta fragilidad implica que dichos cromosomas son propensos a romperse cuando las células se encuentran en condiciones de estrés, lo que puede tener implicaciones en ciertas enfermedades genéticas, como el síndrome X frágil.